Avance de reglas de los Dreadblades

El equivalente caótico a los Caballeros Desarraigados llega con el nombre de Dreadblades y representa a esos Caballeros solitarios que sirven como mercenarios de alguna fuerza caótica.

No tienen Casa o un único amo, por lo que su lealtad siempre es temporal hacia los señores de la guerra y demagogos que le sirvan para encontrar oportunidades de buen combate. Algunos son antiguos Caballeros leales que traicionaron a sus Casas originales por poder o locura, como es el caso de Odio de Krastellan, el loco y autodeclarado Alto Monarca de la Casa Hawkshroud.

Otros fueron capturados por fuerzas caóticas y sus mentes han sido dominadas por rituales y hechicería. El Señor de la Destrucción, por ejemplo, está dominado por el Mechanicum Oscuro de esa forma.

Otros simplemente se han vuelto locos tras años de violencia. Es el caso de Décima, Masacre Encarnada, el último de los Caballeros de la Casa Merridon que se volvió loco tras sobrevivir contra los Tiránidos.

Los Dreadblades pueden ser también de Casas Iconoclastas o Infernales, por lo que la ventaja de dichas casas para Destacamentos con esa palabra clave les sigue aplicando. Antes de la batalla, un Dreadblade por cada Destacamento puede hacer una serie de Pactos y Maldiciones. Estos son dos ejemplos de Pactos:

Se puede elegir un Pacto, o tirar al azar para tener dos. Pero se equilibran con las Maldiciones. Por ejemplo, tenemos esta Maldición que impide usar Estratagemas sobre el Dreadblade:

Las Maldiciones sólo aplican cuando se falla un chequeo de Liderazgo al inicio de cada turno propio, por lo que no siempre van a aplicarse. Se puede tirar al azar una Maldición, o elegir dos. A fin de cuenta, perder tu Habilidad de Proyectiles o no poder Retirarse no son verdaderos problemas si sólo quieres aplastar y cortar al enemigo en combate.

Además los Dreadblades puede ser cualquier chasis de Chaos Knight, es decir: Tyrants (los Dominus imperiales), Despoilers (los Questoris) o Perros de Guerra (los Armigers).